
Nunca tuve ninguna duda, sabía que iba a terminar mal y eso es lo que tengo.
Una multitud vacía gritando, llorando por el daño que aparentemente he hecho.
La gente mira fijamente mi corona, no tengo un Reino Mágico, pero poseo todo lo que toco.
No podría ser tu chico, pero soy todo lo que quieres ser.
Soy un niño de papá con la cara manchada de barro y estoy diciendo tu nombre, ya no conozco el mío.
Y trato de olvidar todo lo que solía ser hasta ahora. Todo lo que quiero es ir, es huír.
¿Quieres venir?
Sólo enseñame el camino, te seguiré a todas partes. No necesito ninguna razón para ser tu amigo, me encanta la forma en la que me haces girar, estoy fuera de control...
No hay comentarios:
Publicar un comentario